Jesús dijo a sus
Apóstoles: “somos la luz del mundo que brilla en una montaña”, antes de mandarlos
a evangelizar. Con esas palabras les concedió identidad pública, hace 2000
años.
Si ese mismo concepto
lo queremos aplicar para analizar nuestra identidad como argentinos en el mundo
de hoy, indudablemente no es verdad. Nos falta luz, y moral. Para el mundo
exterior la Argentina tiene un escaso valor,
cercano al “cero”.
En nuestro mundo
interior, también andamos pésimamente tendiendo hacia el cero, porque nuestros
líderes políticos (el 90 %) no atinan a trabajar en conjunto porque dejan
primar sus intereses personales. No creemos que sean incapaces, pero sí son
irresponsables. Les gusta trabajar de apuro y con parches, no con planes ni programas
para un largo plazo.
Todos saben que andamos
muy mal por falta de liderazgo político, y que nuestra economía no anda bien
pero que puede corregirse si fuesen racionales y no emplearan métodos perimidos
y fracasados en el mundo entero, y en nuestro país, más de una vez.
¿Qué esperan para
asumir todos al unísono, dentro de la constitución, sus responsabilidades de
líderes de los pueblos, y comenzar a encontrar un camino de superación y
salida? ¿Cuántos más sacrificios debemos sufrir todos? ¿Y para qué?
Estas mismas palabras
fueron las empleadas en Febrero de 1976 por el Dr Ricardo Balbín cuando
conversó con el General Rafael Videla. En aquél entonces nadie tenía un plan.
Los militares tomaron el poder pero carecían de plan de gobierno alguno. ¡Así nos
fue, a todos! Debemos aprender del fracaso. No debemos repetir ningún fracaso.
Hoy: los que se van y
no terminan de irse, no quieren hacer algo racional para conveniencia de la
patria. Los opositores, sin planes ni convergencia programática alguna, solamente
esperan la oportunidad para que por una casualidad les toque el turno. En el
medio está el pueblo, que mira azorado y
preocupado. ¿Quién piensa en él? ¿Por qué debemos votar a personas que no nos
representan porque cuando llegan al poder, se olvidan del pueblo?
La última vez, todos
los políticos les echaron la culpa a los militares, y les perdonaron a los
subversivos. Pero ahora ¿de quién será la culpa de la irresponsabilidad?
Aquellos ya no están en el poder, y éstos últimos, están en todos los
gobiernos.
Conclusión: Hoy no
sabemos a quién votaremos, pero sí podemos ahora tomar la decisión parcial de:
1) NO VOTAR A
CORRUPTOS NI A OPORTUNISTAS, PORQUE CON
NUESTRO VOTO LES DAMOS MUCHÍSIMO PODER.
2) DEBEMOS OXIGENAR
LOS GOBIERNOS CAMBIANDO A TODOS LOS QUE ESTÁN DESDE HACE TIEMPO,
REEMPLAZÁNDOLOS POR NUEVOS PARA CONOCER MEJORES.
3) PEDIR EL VOTO
ELECTRÓNICO PARA TODO TIPO DE COMICIO.
JULIO P. LOBATO
Presidente de CRUX ONG
GUSTAVO DE BIANCHETTI
Ing Secretario CRUX ONG
Cuando la “cosa pública” se administra como si fuese algo privado de un funcionario o empleado público, en la religión se llama “pecado”, en lo ético se llama “inmoralidad” y en la justicia se llama “corrupción” que se debe castigar por la ley.
ResponderEliminarCuando trabajamos dentro de la Ley y la Constitución, todos somos capaces de desarrollar nuestra personalidad dentro de un orden, y no según la ley de la selva.
ResponderEliminarLa libertad y la democracia, solamente prosperan plenamente, dentro del orden.
Cuando se dirige un país, políticamente es más importante ser oportuno, que tener razón. Si además, quien detenta el poder carece de razón y de sentido común, el resultado siempre es catastrófico.
ResponderEliminarPero ¿quién elige con su voto a este tipo de dirigente?: un irresponsable, subsidiado con un plan del gobierno federal.
La UIA es a los industriales lo que los sindicatos son para los trabajadores; ninguno debería ser un apéndice político del gobierno. Digámoslo claramente: eso no es democracia sino fascismo, inventado por Benito Mussolini en la década del 30, de donde lo copió Juan D Perón.
ResponderEliminarLa Democracia es discenso de la diversidad en busca del equilibrio consciente entre todas las partes. No es la obediencia a los designios de quien cree tener la suma del conocimiento y la infalibilidad que creían poseer los reyes en la antigüedad.
ResponderEliminarEn nuestra patria hace muchos años que luchan por imponerse: el marxismo y el fascismo. Ambas cosas son basuras e inconstitucionales.
Luchemos contra ellas para que prospere la Constitución, que cumplió 160 años de vigencia
El ciudadano que se siente democrático, siente la necesidad imperiosa de vivir bajo la Constitución Nacional.
ResponderEliminarEl que no lo es, desea vivir bajo el imperio de la Ley de la Selva, de la indignidad y sin futuro alguno.
Luchemos para que esto último no continúe ni un minuto más.
"El socialismo es la filosofía del fracaso, el credo a la ignorancia y la prédica a la envidia; su virtud inherente es la distribución igualitaria de la miseria".
ResponderEliminarWinston Churchill, 1948.
La herencia de Mandela es tan rica que saciaba el alma de más de 40 millones de sudafricanos y de millones más en todo el mundo que con su ejemplo nos empachamos de tolerancia, el afianzamiento en el compromiso por sostener ideales racionales y el amor por la vida en todas sus formas. E. Ezcurra, La Nación del 05 Ene 2014.
ResponderEliminarNingún habitante de la Nación será obligado a hacer lo que no manda la ley, ni prohibido de lo que ella no prohíbe. Art 19 de la Constitución Nacional.
ResponderEliminarLas campañas electorales serias prometen crear trabajos dignos para muchos en cualquier parte del país. Las campañas electorales que no son serias prometen planes sociales sin trabajos dignos, porque nos usan de “esclavos electorales”.
ResponderEliminarAceptar un “Plan Trabajar” es perder nuestra libertad en manos de irresponsables, porque seremos sus esclavos para su conveniencia política. Nunca nos darán un trabajo digno.