31 de mayo de 2013

CRUX ONG Y LAS IDEOLOGÍAS


El tema del “Combate de Manchalá” sigue generando polémica política porque el “Relato Oficial” no se ajusta a la verdad histórica. Los Suboficiales y los Soldados Conscriptos que lucharon entonces (en 1975) están vivos, y ellos luchan por la Verdad. Nosotros también. Los 2 Suboficiales y los 10 conscriptos no salieron por su cuenta a atacar a nadie. Ellos estaban cumpliendo órdenes legales para la “defensa de la Constitución y de sus leyes” dictadas por el Poder Ejecutivo Nacional.
El tema de Manchalá tiene que ver con la raíz de la tragedia política que vivimos desde hace años en Argentina: EL RELATO MENTIROSO. Nadie cuestiona que el hecho haya existido, el problema es cómo se lo presenta, y nosotros ahora, analizamos por qué se lo presenta así.
El combate tuvo lugar en la localidad tucumana de Manchalá, muy cerca de Famaillá, el 28 de mayo de 1975, durante el Operativo Independencia, en cumplimiento del Decreto Nacional de la Presidente constitucional María Estela Martínez de Perón dictado en Enero de 1975.
El hecho fue así: una columna del Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP) durante su marcha hacia el Comando de la Brigada del Operativo que estaba a unos 10 km, se encontró con un pequeño grupo del Ejército Argentino, formado por un par de suboficiales y una decena de conscriptos pertenecientes a la Compañía de Ingenieros de Montaña 5, destinados en Salta, y que estaban en Tucumán por el Operativo Independencia. Eran conscriptos bajo bandera, durante el servicio militar obligatorio de esos jóvenes salteños.
Es importante precisar el contexto del hecho, y nunca soslayarlo para decir Toda la Verdad. Argentina era gobernada por el gobierno constitucional de María Estela Martínez de Perón, quien había asumido un año antes cuando murió Juan Domingo Perón, presidente en ejercicio del poder.
La circunstancia era totalmente distinta a la Cuba del dictador Batista y a la Bolivia de Barrientos, donde combatió el Che Guevara. Aquellos eran gobiernos totalmente ilegítimos. El de la Argentina de 1975 era constitucional por elección del pueblo argentino, el soberano de hoy y de aquel entonces también.
El propio presidente Juan Domingo Perón había echado del movimiento peronista a Montoneros y al ERP, grupos que habían tomado una posición distinta al de su líder. Lo hizo con la más auténtica simbología del peronismo: los expulsó de la Plaza de Mayo, a la vista de todos y figuró en todos los diarios. Lo cierto es que adoptaron una posición radicalizada, tomando las armas para combatir al Gobierno Constitucional, y así atacaron a la Constitución y al pueblo argentino.
Que se interpretara HOY que el pequeño monolito era un monumento al terrorismo de Estado es totalmente disparatado, antojadizo y por sobre todo: mendaz. Conmemoraba solamente el heroísmo de un puñado de conscriptos bajo bandera que defendieron con su vida, su deber de defender el orden constitucional.
La realidad es entonces que el hecho fue exactamente al revés de la argumentación oficial para solicitar su demolición por parte de Concejales del FPV de Salta, del Intendente de la ciudad y del Gobernador actual de Salta.
También es culpable de la mentira oficial el Sr Ministro de Defensa Nacional, quien con toda la documentación en su propio ministerio, sostiene lo contrario al afirmar que “el Estado democrático no puede asignar denominaciones honoríficas, placas o menciones conmemorativas de carácter público a la represión ilegal y el quebrantamiento de la institucionalidad democrática”.
El Sr Ministro miente, porque no hubo una represión ilegal ni se quebrantó la institucionalidad democrática, cuando sucedió Manchalá. Es desconocer que los conscriptos habían jurado defender a la Patria y al orden constitucional, y eso es justamente lo que estaban haciendo desde Enero 1975.
El Ejército estaba bajo el orden constitucional, cumpliendo órdenes impartidas por el Gobierno Nacional mediante Decretos públicos y legales. En aquel momento, esa era la realidad.
Estaban todas las condiciones constitucionales para dirimir posiciones ideológicas no por las armas, sino asumiendo TODOS los políticos de entonces (peronistas del gobierno y todos los opositores) su responsabilidad. Entonces TODOS no lo  hicieron, y hoy se busca al chivo expiatorio mintiendo,  con el triste silencio de muchos “opositores” (u ¿“oportunistas”?).
La gran tragedia que vivimos en la Argentina de ahora es que nunca los políticos (TODOS) y la población toda no se animan a reconocer aquel error histórico y seguimos considerando aún HOY como un error del gobierno federal (el gobierno peronista ortodoxo, no marxista, de 1975) para ordenar a sus Fuerzas Armadas que luchen contra los que sostenían la ideología marxista que trataban de lograr el poder mediante el uso de la fuerza.
Los argentinos no debemos olvidar los enormes apoyos financieros, de preparación militar y de armas que recibían los subversivos desde Cuba, y de otros países de Europa, todo ello en forma desembozada. 
No se justifica de ninguna manera que hoy un gobierno constitucional que se auto titula peronista, cuestione y mienta deliberadamente respecto de lo resuelto legalmente por otro gobierno peronista y tan legal como el actual. Esa es la verdad completa y es la única realidad.
Entonces ¿Por qué se miente desde todos los niveles?
Ni la defensa del monumento ni nadie en este momento estamos reivindicando el proceso militar. El proceso militar sucedió mucho tiempo después, y es otro tema.
Demoler el pequeño monumento es pretender imponer por la fuerza, patoteramente y basado en la mentira, un nuevo error histórico, que tanto nos cuesta aceptar. Se pretende mantener dividido al pueblo en forma irresponsable y artificial, para mantener el poder a cualquier costo. Eso es faltar a la ética política, en forma  muy clara.
NO nos dejemos llevar por el Relato sesgado e ideológico, que no se ajusta a ninguna verdad histórica, y sí a conveniencias mezquinas y groseras. Eso es falto de ética.
Hoy ninguno se siente parte de alguna minoría poderosa que busca preservar ningún privilegio, ni nadie es destituyente porque digamos la Verdad completa.
Todo lo contrario: la inmensa mayoría es la que busca y desea vivir en paz. Para ello se necesita que desde el PEN se suprima la mentira oficial, y se destituyan a todos los funcionarios por  irresponsables (civiles y militares) que intervinieron en este hecho vergonzoso que se pretende tergiversar mediante actos y apoyos falaces.

LA VERDAD OS HARÁ LIBRES. Jesús de Nazareth, hace 2000 años. Biblia.
Dado en Mar del Plata, el 30 de Mayo de 2013.

JULIO P. LOBATO
Presidente de CRUX ONG

GUSTAVO DE BIANCHETTI

Ing Secretario CRUX ONG

18 de mayo de 2013

¿ES NECESARIA LA IDONEIDAD EN LOS CARGOS PÚBLICOS?



Debemos reconocer que hemos sufrido en las últimas décadas una progresiva desarticulación de la capacidad de nuestros dirigentes políticos para conducir políticamente, dentro de la Constitución, al país. Esto sucedió con la participación activa (por acción, y, por omisión) de todos los partidos políticos, de los empresarios y de los sindicatos, sin excepción. También contribuyó la apatía de la ciudadanía.
Pero también es verdad que esa desarticulación no se invierte a fuerza de repetir el diagnóstico, de menospreciar a la burocracia estatal o de intentar reemplazarla por un conjunto de individuos con pretensiones mesiánicas. Hablando no se resuelve el tema. Es necesario proceder, siempre dentro de la Constitución.
El desinterés por la gestión pública estratégica y competente de los partidos políticos, se paga inexorablemente con un deterioro de la calidad de vida de toda la comunidad. 
La incompetencia para desempeñar los distintos cargos públicos afecta a todos por igual, a la provisión de bienes y servicios, y a veces también, hasta con víctimas inocentes (Tragedia ferroviaria de Once, inundaciones en La Plata, falta de petróleo nacional, disminución del comercio exterior, inflación, poca calidad de la educación, etc.). La incompetencia es muy cara, y disimula la corrupción.
Ningún diagnóstico por sí solo soluciona a los problemas. Es necesario pasar a la acción eficaz y constructiva. Esto es posible solamente mediante el valor espiritual que albergue el corazón y el espíritu de cada uno de los argentinos. Todo ello debe estar reunido en partidos políticos de verdad, sin ideologías extrañas ni extranjerizantes, para que sepan ver nuestra realidad. 
En las últimas décadas se nos habla siempre de los “intereses partidarios” o personales, y queda fuera de sus visiones y discusiones el Bien Común, objeto de la política.
Se logra simplemente cumpliendo lo determinado en la Constitución Nacional que es nuestra carta y nuestro compromiso de Libertad, de Democracia y de República. Eso se llama Patriotismo ciudadano. Eso es civismo de calidad. Lo demás son charlatanerías sin idoneidad.
No serán las últimas víctimas ni los últimos corruptos vistos si no cambiamos, y ello sólo es posible si los Partidos Políticos nos enseñan y conducen hacia el cambio.
¡Basta de lo mismo de siempre: cambiar algo para que nada cambie! Debemos cambiar en serio. No más de lo mismo. En la crisis del 2001 se pidió: “¡Que se vayan todos!”. Pero todos cambiaron de puestos o de partidos, y quedaron los mismos hasta hoy.
Para ello es necesario comenzar CAMBIANDO A LA GENTE QUE HACE LA POLÍTICA y al mismo tiempo CAMBIAR LA FORMA DE HACER LA POLÍTICA, AGREGANDO LA ÉTICA.
Mantener tontamente una ideología partidaria, y no saber ver la realidad cotidiana, no solamente es simple soberbia, sino FALTA DE IDONEIDAD que hace fracasar los mejores deseos de mejorar el liderazgo político para conducir a la comunidad. La Incompetencia y la Soberbia normalmente corrompen a los ejecutores de los partidos en todas las épocas (ver en la Historia universal y argentina).
CRUX ONG manifiesta públicamente que: Queremos héroes cívicos, NO queremos masas (al revés de lo sostenido por el nazismo, el marxismo y el fascismo). 

En CRUX ONG no somos ultra conservadores, pero nos declaramos decididamente innovadores de centro en todos los órdenes para perfeccionar nuestra democracia, con ética y con principios.

Con ese motivo publicamos nuestras ideas, mostrando un criterio desapasionado y poder contribuir en la búsqueda del Bien Común que nos convoca a todos por igual. Sin ideologías y siguiendo exclusivamente los principios determinados en la Constitución Nacional. Nada por sobre ella, ni nada sin ella.
JULIO P.LOBATO
Presidente CRUX ONG

GUSTAVO DE BIANCHETTI
Ing Secretario CRUX ONG

14 de mayo de 2013

EL DERECHO A LA VIDA



El Caso Píparo ha conmocionado a todo el país. Los imputados recibieron cadena perpetua por  el robo, intento de homicidio a Carolina y el homicidio de su bebé Isidro.

El Tribunal reconoció que eliminar el derecho a vivir de Isidro constituyó un acto de homicidio.

Grandes marchas por la vida, también suceden simultáneamente, hoy en Otawa y en Roma.

Nuestra justicia ha sentado en forma clara,  digna y en forma impecable,  que: desde ahora, todos los bebés que aún no han nacido, tienen el Derecho a la Vida. Esto es el meollo del tema que justifica la alegría de CRUX ONG porque es el triunfo de la Verdad contra la mentira y las ideologías manifiestas en esta última década  en nuestra Patria

También digamos, que otro argentino en forma valiente y desde Roma,  ayer el Papa Francisco, pidió garantizar la protección jurídica del embrión humano. Está en la punta de la modernidad y responsabilidad que exige nuestro  tiempo, para mirar al futuro común.

¡Qué hermoso es soñar con nuestro futuro! ¡Qué hartos estamos de mirar al pasado!

CRUX ONG levanta su voz de gozo y de alegría, porque en nuestro país, se ha producido un hecho ejemplar, después de una década de desvaríos continuos provocados sin ton ni son, por verdaderos incompetentes. 

Reconocemos que: la Justicia, todavía independiente del gobierno federal, ha sabido mostrar su profesionalidad y valor.  

Pedimos a Dios Nuestro Señor, fuente de toda razón y justicia (como dice el Preámbulo de nuestra Constitución) ilumine a la Justicia para que en los próximos días rechace por inconstitucional  a las 6 leyes votadas para doblegarla y quitarle su Independencia para el ejercicio de sus funciones.

JULIO P. LOBATO
Presidente de CRUX ONG

GUSTAVO DE BIANCHETTI
Ing Secretario CRUX ONG

12 de mayo de 2013

BICENTENARIO DEL HIMNO NACIONAL ARGENTINO



Este artículo consta de 2 partes. La primera es un fragmento del relato que el nieto del autor del Himno nos narra cómo se preocupó su abuelo en lograr que el principio de la canción fuera majestuosa, convocante y sincera de los sentimientos patrios que en esos momentos envolvía a la ciudadanía. La segunda es una narración breve de la causa por la que oficialmente se decidió que se cantara una parte del mismo, satisfaciendo necesidades históricas, de protocolo oficial y para que la canción fuese cantada más veces por nuestra población.
Nuestra canción patria no tuvo ni tiene ninguna intencionalidad política, salvo la de convocarnos a amar a nuestra Patria. Muchos años después de aprobada esta canción, la Constitución Nacional, se ratificó rotundamente esta misma actitud convocante y de no división de nuestra sociedad.

Primera Parte (Fragmento de (1) “Cómo se escribió el Himno”, publicado hacia 1870)
Don Vicente López y Planes había nacido el 3 de mayo de 1784 en la misma casa en que murió en 1856, y, cosa singular, en la misma habitación. La casa es la que hoy lleva el número 353 en la calle Perú.
El Himno Nacional fue escrito en la segunda habitación de la entrada de la casa mencionada, sobre una mesita de caoba de abrir y cerrar, comprada por la familia López a los oficiales ingleses de Whitelocke en 1.807.
Se conserva todavía esta tabla sencilla en que vació el primer modelo de las estrofas marciales. Se conserva el tintero que tuvo la tinta que sirvió para escribirlas.
El poeta, desde fines de abril, pedía inspiración a las musas, y cuenta él mismo que una atmósfera húmeda y pesada influía notablemente en su sistema nervioso y lo traía abatido desde días atrás, sin luz ni nervio en la mente.
Varias veces ensayó sobre el papel, golpeando en vano en el parche épico dos o tres estrofas en el metro en que Luca había escrito aquella canción patriótica, publicada por "La Gaceta" en noviembre de 1810, y que comenzaba así:
La América toda se conmueve al fin
Pero ni la inspiración ni el metro, ni el poeta mismo, se mostraban dignos de la epopeya revolucionaria que, ya en 1813 había batido a los españoles en Tucumán y Salta, en el Alto Perú, en San Lorenzo y en la Banda Oriental. El poeta arrojaba a la pluma descorazonado, sin ánimo, rendido por una esterilidad de numen que lo decía desfallecer.
La noche del 8 de mayo (de 1811), López se puso su frac de grandes cuellos y solapas, abierto sobre la esponjada pechera de valencianas; se cubrió con su capa roja y atravesando la calle solitaria del Perú, casi oscura entonces y con no pocos pantanos, llegó a las puertas de la Casa de Comedias. El poeta ocupó un modesto lugar en el patio del teatro, en que pocas semanas después debía de resonar el himno nacional con las notas de don Blas Parera.
En aquellos días, el teatro era la fragua del entusiasmo en que se templaban los patriotas. Todos los pasajes patrióticos del drama eran de oportunidad y se aplaudían aplicados a las cosas y a los sucesos ... Después del segundo acto, deshaciéndose de sus amigos que procuraban retenerlo, salió del teatro con el cerebro ardiente, el corazón palpitante, el pecho henchido de inspiración Puede decirse que el himno había nacido desde aquel momento ...
Su .gran abertura: OíD MORTALES, abrió la grande escena de la canción; la inspiración había tomado su vuelo soberano con el metro valiente y marcial que había sonado al oído del poeta, apagando el metro flébil. pastoral, anacreóntico de Luca y de Rodríguez, reflejo tímido de los versos del delicado Arriaza.
Por la calle, con paso acelerado, procura llegar pronto a su casa, porque las estrofas, una detrás de las otras, se presentaban a sus labios, se amontonaban buscando la hoja de papel en que debía vaciarse.
Llegó a su casa a las diez de la noche, encendió la luz; la familia dormía; y allí, sobre la mesa, casi vertiginosamente, cayeron una a una las octavas que un año después debían de sonar en todos los ejércitos argentinos y ocho años después en toda la América del Sud.
López no durmió aquella noche; leyó y releyó sus estrofas; su entusiasmo, su excitación, no le permitieron enmendar los versos débiles de que algunas de ellas se resienten.
Al dla siguiente, López buscó a sus amigos: a Luca. Paso (don Juan F.) y les leyó su borrador, arrancando en ellos las primeras lágrimas de entusiasmo que debía arrancar, en rostros argentinos, la canción patria. EI 11 de mayo de 1813 la presentaba a la Asamblea (General Constituyente) y era aclamada unánimemente.
Poco tiempo después, un selecto concurso se agolpaba en la estrecha escalera del Consulado; nuestros abuelos y bisabuelos tomaban asiento en el gran salón para oír el primer ensayo del himno puesto en música por don Blas Parera.
Estaban allí todas las matronas de los primeros salones argentinos: señora María Sánchez de Thompson, Mercedes Escalada, Eusebia Lasla, etc., todos los jóvenes de la revolución, sus tribunos, sus sacerdotes, sus guerreros. Aquel concurso se puso de pie y con respetuoso silencio oyó las notas de un himno que debía ser el monumento más duradero de la revolución.
(1) Autor de este fragmento: LUC!O V. LÓPEZ  El autor de esta narración fue nieto del autor del Himno Nacional Don Vicente López y Planes. Nació en Montevideo (Uruguay) en 1848 y murió en 1898. Fue hijo del historiador Don Vicente Fidel López, autor del conocido libro “La Gran Aldea”, novela que retrata la vida de Bs As en los primeros días de la Revolución de Mayo de 1810.

Segunda parte:
Tres días más tarde de la aprobación por la Asamblea General Constituyente de 1813, se entonó por primera vez en la casa de Mariquita Sánchez de Thompson. Además de la dueña de casa y su marido Martín Jacobo Obligado estaban presentes, entre otros, Bernardo de Monteagudo, Carlos María de Alvear y el entonces coronel, José de San Martín, acompañado por su novia, Remedios de Escalada, etc.
Compartieron también esa velada los autores: de la letra, don Vicente López y Planes y el músico catalán don Blas Parera. El Público no invitado, siguió la canción desde las veredas y calle exterior de esa propiedad.
El actual “Himno Nacional Argentino” tuvo una versión original más extensa que se cantó hasta 1900, alentada en su contenido por las ideas independentistas y antiespañolas del momento de la creación. Su ejecución duraba más de 20 minutos.
En la segunda presidencia de Julio Argentino Roca se adoptó la versión actual, en la que se cantan sólo la primera y última cuartetas y el coro de aquella “Marcha Patriótica”.
Los inicios del siglo XX eran tiempos de paz y entonces ya vivían en suelo argentino muchos españoles nacionalizados y con hijos argentinos, a los que se quería hacer sentir que estaban con todo derecho, en su propia casa. Esta nueva modalidad se ejecuta en algo más de 3 minutos y medio, y se la adoptó también por razones prácticas a fin de ser utilizada en las escuelas y en todos los actos públicos con más frecuencia.
En 1860 se encargó al músico Juan Pedro Esnaola una versión orquestada más rica en lo armónico. La forma definitiva de la ejecución y la letra quedaron establecidos en el decreto 10.302 del año 1944.
Tengamos en cuenta hoy, que para ese entonces (1900) eran historias del pasado las alusiones a los españoles como “tigres sedientos de sangre” o “el fiero opresor de la patria”.
Como se podrá ver, de la lectura completa del texto original del Himno Nacional Argentino no se infiere ninguna alusión desdeñosa hacia ninguna población (extranjera ni de pueblos nativos) porque el espíritu de patriotismo y de generosidad con que fue escrita, jamás consideró tal imprudencia ni vileza.
Años más tarde (1853), en el Preámbulo de nuestra Constitución Nacional se ratificó rotundamente la intencionalidad de generosidad con que nuestro suelo se abría a todos los hombres libres del mundo que quisieran habitar en nuestro suelo.
Pedimos a todos nuestros conciudadanos que todo otro sentimiento que no se correspondiere con el generoso y amplio espíritu patriótico con que fuera escrito, aprobado y mantenido hasta la fecha, que se mantenga, y que no prospere ninguno otro, porque éste sería sectario u opuesto al espíritu amplio con que fuera escrito y cantado desde hace 200 años.
Con estas consideraciones cívicas, sentimientos patrios de hoy y la ratificación del sentimiento patrio con que fuera escrita esta Canción, rendimos justo homenaje y recordamos así el Segundo Centenario de la adopción de nuestro Himno Nacional.
Julio P Lobato
Presidente CRUX ONG

Gustavo de Bianchetti
Ing Secretario CRUX ONG